LOS PELIGROS DE LA WEB 2.0

 

¡La Web 2.0 y su rollo conversacional! 🗣️

La Web 2.0 ha revolucionado todo el tinglado de Internet, y las empresas que curran con herramientas, productos o servicios online lo están notando a tope. 🌐 Todo ha cambiado: desde cómo se crean y usan estas herramientas hasta cómo se relacionan las empresas con la peña. Los usuarios ahora somos creadores de contenido, ¡y eso ha puesto el mundo patas arriba! 🙌 Las empresas están flipando con cómo un problemilla con un producto puede hacerse gigante, cómo la comunicación se vuelve viral en dos segundos, o incluso cómo pueden diseñar productos con la ayuda de los usuarios. ¡Es la economía conversacional, amigos! 💬

INTERNET ES Y DEBERÍA SEGUIR SIENDO PARA TODOS

Abrirse al mundo: ¡basta de muros! 🚪

Lo primero que tienen que pillar las empresas es que hay que abrirse al exterior. Durante años, muchas se han escondido detrás de muros, dejando que solo el departamento de relaciones públicas hablara por ellas (¡y a veces hasta le decían al jefe qué podía decir!). 😅 Pero ahora toca cambiar: las empresas tienen que aprender a charlar, a escuchar lo que pasa fuera y a formar parte de la conversación.

Esto significa que en su web deben crear espacios para hablar con la gente: blogs corporativos a nivel global o incluso blogs personales de los jefazos. 📝 Así tienen una voz más cercana, que no suene a las típicas notas de prensa de antes. Un blog corporativo mola porque te deja charlar con la peña, pero ojo, hay que hacerlo con naturalidad, sin ese tono súper formal y artificial que usaban las empresas en el siglo pasado. Como dice el Cluetrain Manifesto, ese rollo antiguo pronto nos parecerá tan raro como el lenguaje de la corte francesa del siglo XVIII. 😂

Cuidado con los peligros de la conversación ⚠️

Eso sí, meterse en este mundo tan conversacional tiene sus riesgos. No todo el mundo sabe cómo manejarlo con educación. Te puedes encontrar de todo: desde comentarios súper majos que te avisan de algo que haces mal, hasta alabanzas a tu producto que te suben el ego, pero también cosas heavys que rozan la difamación. 😬 En esos casos, hay que tener cuidado y no meter la pata. Si entras como un elefante en una cacharrería, la cosa puede irse de madre y hacer que el tema se haga aún más viral, pero para mal, y tu imagen se vaya al garete. 🚨

Las ventajas de un blog corporativo 🌟

Tener una página con un blog mola mil porque te deja hablar directamente con tus clientes. Ellos te pueden dar info súper valiosa en tiempo real, como si fuera un estudio de mercado pero sin gastar un duro. 🤑 Es curioso, hay empresas que se gastan millones en sistemas de CRM para saber qué piensan sus clientes, ¡cuando ellos están ahí fuera dispuestos a contártelo gratis en foros y blogs! Además, con un blog puedes ver quién te menciona y dónde, porque recibes enlaces de otras páginas. Es como un sistema de alerta para estar al tanto de lo que se dice de ti, tus productos o tus directivos. 🔔

Actúa con cabeza y sin prisas 🧠

Otra clave en la Web 2.0 es saber reaccionar a lo que te llega del exterior, pero con calma y sin pasarte. Nada de actitudes como “la empresa no baja a discutir con sus clientes” o “¡enviemos a los abogados!”. Eso no mola. 😒 Lo mejor es estar atento, enterarte rápido de lo que pasa y tener un blog con buena visibilidad para poder responder con tu propia voz.

No trates a los bloggers como medios tradicionales 🚫

Un error gordo es tratar a los bloggers o a cualquiera que hagas un comentario sobre ti como si fueran un medio de comunicación al uso. Mandarles una nota de prensa o meterlos en una base de datos de envíos puede parecerles spam, y eso no ayuda a crear una buena relación. Un blogger no es un medio, ¡es una persona! Si quieres entrar en su conversación (y no controlarla), tienes que tratarlos como tal, con respeto y naturalidad. 🤝

La viralidad: con cuidado, ¡porfa! 🎥

La viralidad es otro temazo de la Web 2.0. Puede molar mucho para que la gente hagas de tu empresa o tus productos, pero no es la panacea ni hay que volverse loco creando “virus” a lo bestia. Hay que ir con cuidado con plataformas como YouTube o filtros sociales como Menéame o Digg. Si lo fuerzas demasiado, puede parecer que intentas engañar a tus clientes, y eso es un tiro en el pie. Algunas campañas virales mal hechas han sido un desastre y han dejado a las empresas en plan “¿en serio intentaste colarnos eso?”. 😳 Hazlo de forma natural, sin forzar la máquina.

TE ENCONTRARÁS MUCHOS TROLLS POR LA WEB

Tu propio canal de tele 📺

La Web 2.0 te permite tener tu propio canal de televisión sin gastar un pastizal en hosting o producción. Puedes crear contenido decente sin dejarte el sueldo, y eso mola. Pero, de nuevo, hay que tener cuidado con las campañas virales si no sabes cómo manejarlas bien, porque puedes meter la pata y dañar tu imagen.

La larga cola: vender poquito a muchos 🛒

Con la Web 2.0, puedes llegar a un montón de gente a nivel global, pero de forma súper personalizada. Los nichos que antes parecían imposibles ahora están a tiro gracias a los buscadores, que funcionan de forma democrática. Ahora los clientes te encuentran a ti cuando buscan algo relacionado con tus productos. 🔍 Esto es lo que Chris Anderson llama “la larga cola” (The Long Tail, 2006): en vez de ir a por el bestseller de siempre, puedes vender muchos poquitos a un montón de gente diferente. En una economía basada en la conversación, esto tiene todo el sentido del mundo, tanto para los productos como para la comunicación. 🌍

Reflexiona antes de lanzarte 🤔

La Web 2.0 no es solo un montón de herramientas chulas, sino un cambio gordo que hay que tomarse en serio. No vale ni pasarse de frenada diciendo que es una moda tonta, ni lanzarse como loco sin pensarlo bien. Las empresas tienen que reflexionar y replantearse cómo encajan en este nuevo rollo conversacional, porque aquí las reglas han cambiado. ¡A charlar se ha dicho! 💬